Jökulsárlón es la laguna glaciar más famosa de Islandia. No es para menos porque, además de la más espectacular y la más grande es la más accesible, junto a la misma carretera que circunvala la isla. Su nombre, en un alarde de creatividad muy típico islandés, significa nada más y nada menos que laguna de río (sá-rlón) glaciar (jökull). Y para los amantes del séptimo arte, tendremos que decir que Jökulsárlón ha servido de escenario para varias películas como Batman Begins (Chistpher Nolan, 2005) Lara Croft (Lara Croft Tom Rider, Simon West, 2001) y Beowulf & Grendel (Sturla Gunnarsson, 2005). Pero dejadme dar rienda suelta a un poco de mi mitomanía para destacar, sobre todo, al agente de los agentes, Bond, James Bond, deslizándose alocadamente sobre la nieve en la escena inicial de Panorama para matar (A view to a kill, John Glen, 1985) con Roger Moore sobre los esquís, y pasando apuros de la mano de Pierce Brosnan y Hale Berry en las persecuciones cargadas de efectos especiales junto al palacio de hielo del malvado Gustav Graves (interpretado por Toby Stephens), en Muere otro día (Die another day, Lee Tanahori, 2002). Si nunca antes habéis visto de cerca un iceberg, aquí vais a tener una magnífica ocasión porque son precisamente las decenas de témpanos flotando en sus aguas quienes le confieren su singularidad y su belleza. Y lo podréis hacer navegando entre los inmensos bloques de hielo desprendidos del frente del glaciar, mientras se deshacen lentamente para fundirse con el mar.
Jökulsárlón es el paradigma del proceso de desaparición de los hielos continentales. Es una laguna producida en su retirada por el Breiðamerkurjökull, una de las principales lenguas en la cara este del mayor de los glaciares europeos, el Vatnajökull. Es un magnífico ejemplo de los conocidos como lagos proglaciares, con una profundidad de más de 100 m y una extensión de 18 km2 que, hasta día de hoy, casi se puede ver cómo va creciendo.
A principios de los años 30 del pasado siglo, la gran lengua lamía literalmente las olas hasta que en 1935 comenzó a replegarse. Hoy, más de 3 Km. la separan del Atlántico. La laguna y el mar se comunican por un corto canal fluvial, no me atrevo a llamarlo río, de aproximadamente kilómetro y medio y, si el proceso natural no se viera interrumpido, es muy probable que la corriente del agua del deshielo y la fuerza marina favorecerían la penetración del océano y acabarían transformando el lago en una ensenada.
En sus alrededores hay nidales tanto de págalos (Catharacta skua) como de charranes árticos (Sterna paradisaea). En julio suelen haber sacado los pollos ya que anidan entre mayo y junio, pero no será raro verlos aún por la zona. También es bastante corriente que las focas se acerquen hasta la playa y que, ocasionalmente, penetren en la laguna.
Aquí tenéis un par de preciosas fotos del barco vikingo de Beowulf & Grendel desafiado icebergs.
Y si queréis más imágenes, os pongo una de las tantas direcciones que podéis encontrar en la red.
http://www.islandsmyndir.is/html_skjol/sudurland/jokulsarlon/forsida_jokulsarlon_01.htm
domingo, 8 de marzo de 2009
Jökulsárlón 1: el paisaje
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